TU ERES EL ESPEJO QUE MIRO PARA MIRARME… Y YO SOY EL REFLEJO DE LO QUE TU MIRAS AUNQUE NO LO QUIERAS VER.

Maribel Genzor

31 octubre 2011

Tras el Saber Escuchar

No podéis ni imaginaros las caras de los asistentes al encuentro Saber Escuchar que se celebró el miércoles pasado cuando tras definir lo que significaba “saber escuchar”, propuse una dinámica…
No se valoró en un primer momento lo que la herramienta podía proporcionar, no creo ni por un momento que ninguna persona fuera consciente de lo que se pedía, porqué se pedía y, que encerraba la realización del ejercicio,  tanto es así que tuve que repetir varias veces que había que hacer…
¿Qué NOS DA TANTO MIEDO AFRONTAR?, porque lo que vi fue miedo a que los demás descubrieran ¡yo que sé…!
Pero si sólo se trataba de saber lo que inspirábamos a los demás, y sacar conclusiones de que sienten, los que nos rodean,  de nosotros.
ESTAMOS MAS PREPARADOS PARA DAR LA ESPALDA A LAS OPINIONES Y SENTIMIENTOS QUE PARA AFRONTAR LA AUTENTICIDAD DE LOS MISMOS. NO QUEREMOS SABER, NO QUEREMOS DEJARNOS VER, NO QUEREMOS PARTICIPAR NI RESPONSABILIZARNOS POR QUE ESO NOS PUEDE HACER DAÑO, CUANTO MENOS NOS PUEDE PROPORCIONAR SUFRIMIENTO… ¡Y NO, NO QUEREMOS LUZ!
¿Qué hacemos cuando tenemos la información de lo que somos capaces de generar en nuestro entorno?
-          Yo lo que suelo hacer es SORPRENDERME, y aunque a mi edad ya hay pocas cosas que me sorprendan en la vida, lo que proyecto todavía lo hace…
-          Si me dan feedback y el resultado es positivo, me siento bien, me siento con fuerzas de proseguir, pero si el resultado es negativo, al principio me incomoda, luego paso por la fase del razonamiento preguntándome el porqué transmito aquello, pero al final de todo AGRADEZCO el enterarme porque así puedo tener la OPORTUNIDAD de crear cambios que modifiquen lo que soy o simplemente proyecto y no me gusta.
¿Qué HACES TU?
¿Sabes LO QUE INSPIRAS A LOS DEMAS?
Te reto a que preguntes y A QUE APRENDAS A ESCUCHAR.

21 octubre 2011

Tras La Comunicación Feliz...

Ayer se vivió en el Encuentro una interrelación digna de recrearse en las exposiciones. Como si de capacidades de enfrentamiento a la vida se tratase, la comunicación feliz suscitó un sí, sí, pero las palabras bonitas, el reconocimiento expresado, la empatía y la asertividad, no sirven para luchar en la jungla en la que estamos viviendo, y de alguna manera el “sálvese quien pueda” y el “que gane el mejor y yo soy primero” fueron sentimientos compartidos por algunos y enfrentados por otros…
No voy a hacer apología del tema, sí dejar constancia de que para sobrevivir a lo mejor en alguna ocasión sirve el enfrentamiento y no el diálogo constructivo, pero yo opino que de lo que se trata no es tanto de SOBREVIVIR, sino de V I V I R; Y PARA VIVIR NECESITAMOS QUE LOS DEMAS LOS SINTAMOS AL LADO Y NO AL FRENTE, LOS ACARICIEMOS Y NO LES PEGUEMOS, Y LOS RECONOZCAMOS Y NO LOS IGNOREMOS.
Yo ésta mañana he recibido una sonrisa inesperada cuando le he dicho a mi vecina:
-¡ Hola buenos días!, como llevas tus huesos en éste día que ha amanecido lloviendo
Y acabo de sentirme muy satisfecha, cuando mirando el móvil una persona que ayer compartió el encuentro, me ha escrito:
en toda la mañana he podido comunicar a varias personas el amor que sentía por ellas, y estoy irreconocible, porque no me ha importado  lo que las personas hayan podido sentir, ahora me importa  lo que siento yo, y esto lo desconocía”
Gracias a todos los que vinisteis y establecisteis la comunicación que dio pié a compartir, a descubrir y a respetarnos.