TU ERES EL ESPEJO QUE MIRO PARA MIRARME… Y YO SOY EL REFLEJO DE LO QUE TU MIRAS AUNQUE NO LO QUIERAS VER.

Maribel Genzor

25 septiembre 2015

SI ERES CAPAZ DE SOLO VER TU REALIDAD
TE ESTAS ENGAÑANDO, PUES NO TIENES MÁS QUE TU VERDAD, Y NO LA VERDAD






gracias a todos por vuestros comentarios privados que , marcan toda una linea de razonamiento y de sentimiento



05 abril 2015


CUMPLIR AÑOS SIN DROGAS

Oye Gema, Alma me ha enviado muchos mensajes y varios vídeos, se ha acordado de mi cumpleaños, como siempre, pero yo no los he contestado.
-Está bien que no los contestes, pero ¿tú que sientes?

-Que está muy malita, pero yo no lo sabía tanto. Sé que si le contesto ella se alterará más. Eso ya lo he aprendido. También sé que ella será siempre así, que está enferma de por vida.
-Me alegro que lo comprendas –respondió Gema- a veces quisiéramos que los nuestros se curasen pero no es posible, y lo debemos aceptar.

- ¿y yo,  me curaré?

Pronunció la pregunta con los ojos fijos en los de ella. El tono fue de súplica y de esperanza. Los labios se cerraron dando por sentado que ya no deberían moverse, y las manos con las palmas hacía arriba le invitaban a que se las cogiera mientras le decía la verdad.

-Yo lo que sé Daniel, es que puedes hacer una vida digna. Que estás recuperándote muy bien. Qué estás aprendiendo a que el mundo de las drogas no te lleva más que a la destrucción de ti y de tu entorno. Yo lo que quiero que aprendas que la vida es algo más que drogas, trabajo, sufrimiento y vacío.
El día de hoy, no te parece mejor que los pasados bajo los efectos de un gran “colocón”. Pues si hoy lo estás viviendo así, que te impide vivir así siempre.

Y luego vino la foto. Y cuando él volvió a soplar las velas, para la foto ¡claro!, levantó su mano para que Gema la cogiese. Y ahí en el apretón selló el convencimiento de que quería salirse de donde había estado. Y pidió si podía pedir otro deseo; y así fue cómo nadie supo lo que había pedido, pero todos supimos que FUE ALGO MUY PROFUNDO Y BONITO.

Rió mucho en el Teatro. Nunca había visto nada así. Aguantó sin fumar. Miraba de reojo a todos por si debía hacer algo y no hacía, y se dejó llevar por las risas del entorno y el ambiente de distensión que se respiraba.

-Quiero decirte que ha sido un día especial, no sólo porque hemos celebrado tu cumpleaños, sino porque has llenado un trocito de nuestro corazón enseñándonos cosas que no sabíamos. – Gema le abrazó mientras le decía esas palabras-

Y Daniel, no pudo hablar…¡sólo la abrazó con toda su fuerza!


22 marzo 2015

Despertar al AMOR

No sé si tú que estás leyendo esto, alguna vez has pensado en qué momento fuiste consciente del amor. Cuando lo sentiste como una fuerza incontrolada que pintaba la cotidianidad y,  parecía una película diferente de la vida que hasta el momento llevabas.
Yo, que en mi vida, creí que todo lo bañaba de auténtico amor, desde siempre, hubo un momento en que descubrí que SI era amor lo que sentía, pero no estaba segura del todo si podía denominarlo amor auténtico, ya que la imperiosa necesidad de sentir compañía, reconocimiento, pertenencia, autoestima, igualdad, normalidad, me hacían blanco perfecto para SENTIR AMOR y ENTREGAR AMOR, pero que en el fondo empecé a valorar lo que encerraban mis actos amorosos y afloraron criterios que desvirtuaban lo sublime del sentimiento.
Supongo que si tienes 18 años, tienes derecho a pensar distinto, si tienes 30, 40 o 50 evidentemente sentirás diferente, pero voy explicar como yo desperté al amor a lo largo de lo que llevo vivido.

Me casé joven, como todos los de mi época, y la decisión de casarme no estuvo sujeta a la reflexión madura (no podía, no era más que una mujer de 21 años), que por otra parte opino debería existir siempre antes de una acción así, y creí ciegamente que mi amor tiraría del carro de la vida con mi libertad y mi responsabilidad, que era lo que se me antojaba delante de mi boda.
Mi marido, una persona buena, que supongo al igual que yo, la compañía, el reconocimiento, la pertenencia, la autoestima, la normalidad, la libertad y el dulce sabor del gusanillo de lo desconocido, le nublaron también y ponderó su sentimiento de amor, al pódium más alto.
Si es cierto que amor, junto con la pasión, y la libertad de vivirlo sin condicionantes, aderezado de independencia y con la fuerza, entusiasmo y fantasía que la juventud nos ofrece, da como resultado un ciego amor poderoso que “podrá con todo, con TODO” que, además lo hacemos nuestro, creyéndonos que jamás nadie en la historia ha vivido lo que nosotros sentimos; en una palabra, nos creemos los amos del mundo, como yo misma sentí y creí.
Y supe lo que es el amor, y supe lo que es confundir el amor, y todo porque cuando de niña pregunté lo que era el amor, la calle, la voz de mis amigas me dio una versión que yo creí a ceguera absoluta.
Me dijeron que amor era un cosquilleo que te ahogaba cuando él estaba cerca, y también me defendieron que amor era que él te pertenecía y tú le pertenecías a él.
¡Vale, vale! Ya me he enterado, pensé. Para sentir amor necesito a un hombre, o sea que amor lo vinculé a otra persona.
Más tarde, en el primer desamor, cuando el cosquilleo aún persistía, pero él ya no se acercaba a mí, supe que amor también era dolor.

¡Eso no me lo habían explicado mis amigas, ni la calle, ni mis profesores!

Hoy sé que AMOR no es una persona, amor soy yo y mi capacidad de valorar, de sentir, de compartir.
Amor es libertad, amor es respeto, amor es paz y pasión, amor es dolor y perdón, amor es captar lo que te la vida y la gente tiene para ofrecerte.

28 febrero 2015

HE ABANDONADO EL LETARGO


Aun cuando el tiempo juega al escondite conmigo,
aunque me pelee por sacar alguna hora de descanso en mi jornada (jornada XXXL),
y cuando los fines de semana se encaran a ganarse un taller de inteligencia emocional,
he decido volver a escribir en éste mi blog, mirando conmigo en lo que me apetece de nuevo retomar.

No es el mejor momento, pero ¿cuando es el momento ideal?

Si no es hoy, no es nunca.

así que...¡Hola de nuevo!

Y cual mariposas hoy alzo vuelo, saliendo de mi letargo.

hasta mi nueva  publicación, digo ¡ aquí estaré de nuevo!